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Situaciones para el aprendizaje de la enumeración en el aula de 3 años

Enumerar una colección consiste en pasar por todos los elementos de la misma sin repetir ninguno. La capacidad de contar sin errores un conjunto de objetos depende en gran medida de las estrategias desarrolladas para enumerarlo. Sin embargo, no se suelen desarrollar en las aulas actividades que pretendan que el alumnado ponga en juego estrategias de enumeración de colecciones. Esta capacidad se trabaja casi exclusivamente ligada a ejercicios de conteo en las rutinas de la asamblea (por ejemplo, contar niños que han venido al cole), actividades de asociación cardinal-cantidad, formación de colecciones de objetos de un número determinado, etc.

Como enumerar bien una colección es imprescindible para contar correctamente, en el proyecto ¡A contar! hemos creído esencial introducir juegos de enumeración en 4 años. Los encontraréis en el cuento 2, Gorrioncito, y en el cuento 5, El mandarín y la mariposa, y explicados con detalle en las páginas de la 57 a la 59 de la guía.

Aunque el material ¡A contar! está pensado para trabajar en 4 y 5 años, es muy adecuado comenzar con la enumeración en 3 años, cuando empiezan a contar.

Si habéis revisado el material, estaréis familiarizados con la forma en que se trabajan estas actividades. A grandes trazos, consisten en propuestas en las que se pide a los niños y niñas que realicen una acción sobre cada elemento de una colección, sin repetir y sin dejarse ninguno. Por ejemplo, tendrán que meter un elemento en cada una de las cajitas (un huevo en cada gallina, una mariposa en cada capullo de seda…).

Estas actividades de enumeración son perfectamente adaptables a niñas y niños de 3 años. Simplemente se debe disminuir el número de cajas a 6, pero manteniendo las colocaciones que os recomendamos.

Hace unos años, dentro del pequeño proyecto Los camaleones que desarrollamos en mi clase, hablamos de la alimentación de estos animales y esto me permitió desarrollar, con ayuda de Carlos de Castro, coautor de ¡A contar!, una serie de situaciones para trabajar la enumeración de colecciones. Con la fundamentación teórica y pedagógica de la actividad y el desarrollo detallado en el aula, escribí un artículo titulado Situaciones para el aprendizaje de la enumeración en el aula de 3 años, que fue publicado en la revista EDMA-06. He querido compartirlo para que os hagáis una idea de qué podéis esperar de vuestro alumnado, cómo organizar el aula para llevar a cabo estas actividades y, si queréis, adaptarlas a 3 años.

 

 

Yo las llevé a cabo en el Rincón de matemáticas durante varias semanas, ya que el trabajo en pequeño grupo es esencial para poder realizar este tipo de propuestas. En todas ellas las instrucciones dadas fueron: «Como sabéis, los camaleones comen insectos. Vamos a alimentar a estos camaleones con estos grillos. Tenemos que dar un grillo y solo uno a cada camaleón, metiéndolo por el agujero de su caja. Así ninguno se empachará y ninguno se quedará sin comer. Cuando creáis que habéis dado de comer a todos, abriremos las cajas y veremos si los hemos alimentado bien y cada camaleón tiene un grillo. Quien lo consiga, habrá ganado». Como veis, estas instrucciones son las mismas que os proponemos en ¡A contar!, pero cambiando el contexto.

 

 

 Para hacer avanzar al alumnado en sus estrategias fui modificando el número de cajas, su disposición en la mesa, la posibilidad de marcarlas o no y de moverlas o no. Así pudieron pasar de estrategias base como el azar, el control visual o agitar las cajas para ver si suena dentro la comida, a estrategias más eficaces como separar las cajas-camaleón con comida del resto, seguir el orden dado por la disposición propuesta por mí (una línea, dado, dos líneas) o realizar un «barrido» del espacio llevando un control mental de las cajas con y sin comida.

 

 Como veréis en el artículo, yo iba haciendo todas las modificaciones de la situación (número de cajas, disposición, posibilidad de moverse, etc.) a medida que iban teniendo éxito en la enumeración de la situación anterior. Es decir, si un alumno o alumna era capaz de alimentar correctamente a todos los camaleones colocando las 6 cajas en línea y quería seguir jugando, le colocaba las cajas en dos filas de 3. Y así fuimos jugando con diferentes opciones durante un tiempo.

Para que os resultase más sencillo en vuestras aulas y más compatible con vuestra forma de trabajar, en ¡A contar! os damos estas variaciones organizadas en las distintas repeticiones del juego. Por ejemplo, en el cuento Gorrioncito, una semana deberán colocar los huevos en la paja con 8 cajas en línea y dos semanas después volverán a hacerlo pero con las 8 cajas en 2 filas de 4. Después, volverán a jugar en El mandarín y la mariposa con otras dos variaciones: 9 cajas en 3 filas de 3 una semana y 9 cajas aleatoriamente en otra. Al llegar a este punto esperamos que casi todos empleen estrategias eficaces (separar las cajas con objeto del resto, seguir el orden dado por la disposición propuesta por nosotros o realizar un «barrido» del espacio llevando un control mental de las cajas con y sin objeto dentro). No obstante, si os parece complicado organizar el juego en semanas separadas, podéis hacerlo como lo hice yo en el artículo, y, una vez que estéis trabajando con el cuento de El mandarín y la mariposa, hacer las dos variantes en la misma semana (9 cajas en 3 filas de 3 y 9 cajas colocadas aleatoriamente). Como el alumnado de 4 años es más rápido que el de 3, una vez que hayan colocado las mariposas en los capullos en las 9 cajas en 3 filas de 3, podéis colocárselas aleatoriamente y que vuelvan a jugar.

Por último, hacer hincapié en un aspecto importante. Para que la actividad sea de enumeración es imprescindible que haya más objetos que cajas (en nuestro caso, más huevos o mariposas que montones de paja o capullos). Si hay la misma cantidad, el alumnado puede saber en qué cajas ha introducido objeto teniendo en cuenta los que les quedan y sería una actividad de emparejamiento.

Para realizar correctamente las actividades de enumeración que se proponen para el cuento Gorrioncito (página 87 de la guía), deberéis imprimir 8 gallinas y, al menos, 16 huevos. Para jugar con el cuento El mandarín y la mariposa sucedería lo mismo, deberéis imprimir 9 capullos, pero, al menos, 18 mariposas.

¡Disfrutad mucho con la actividad y ya sabéis que estaremos encantados de que nos contéis vuestra experiencia!

 

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